Los electrones de diferentes tipos de átomos tienen diferentes grados de libertad para moverse. Con algunos tipos de materiales, como los metales, los electrones más externos de los átomos están tan sueltos que se mueven caóticamente en el espacio entre los átomos de ese material por nada más que la influencia de la energía de calor a temperatura ambiente. Debido a que estos electrones virtualmente no ligados son libres de dejar sus respectivos átomos y flotar en el espacio entre los átomos adyacentes, a menudo se les llama electrones libres.
En otros tipos de materiales como el vidrio, los electrones de los átomos tienen muy poca libertad para moverse. Mientras que las fuerzas externas, como el roce físico, pueden forzar a algunos de estos electrones a dejar sus respectivos átomos y transferirse a los átomos de otro material, no se mueven entre los átomos dentro de ese material con mucha facilidad.
Esta movilidad relativa de los electrones dentro de un material se conoce como conductividad eléctrica. La conductividad está determinada por los tipos de átomos de un material (el número de protones en el núcleo de cada átomo, que determina su identidad química) y por la forma en que los átomos están unidos entre sí. Los materiales con alta movilidad de electrones (muchos electrones libres) se denominan conductores, mientras que los materiales con baja movilidad de electrones (pocos o ningún electrón libre) se denominan aislantes.
He aquí algunos ejemplos comunes de conductores y aislantes.
Índice
12 Materiales conductores
- Plata.
- Cobre.
- Oro.
- Aluminio.
- Hierro.
- Acero.
- Latón.
- Bronce.
- Mercurio.
- Grafito.
- Agua sucia.
- Concreto.
15 Materiales aislantes
- Vidrio.
- Goma.
- Petróleo.
- Asfalto.
- Fibra de vidrio.
- Porcelana.
- Cerámica.
- Cuarzo.
- Algodón (seco).
- Papel (seco).
- Madera (seca.)
- Plástico.
- Aire.
- Diamante.
- Agua pura (en estado puro).
